
19 Sep Zoológico Leslie Pantin: Santuario de conservación de la fauna autóctona del país
Cuando en el año 1963 el veterinario Leslie Pantin inició una colección de animales propios de la fauna venezolana, que en 1974 legalizó como un zoológico privado y que posteriormente llevaría su nombre, su objetivo era contribuir con la conservación de ellos y a su vez, iniciar un programa de educación ambiental para que las personas conocieran estas especies autóctonas y así ayudaran en su protección y cuidado.
Estas dos premisas, siguen vigentes, gracias a los veterinarios Federico Pantin (hijo de Leslie Pantin) y su esposa Tuenade de Pantin, quienes dedican buena parte de su tiempo y recursos a la atención y cuidado de cada una de las especies que habitan en este “santuario de conservación” ubicado a pocos metros de la entrada del sector Rosario de Paya en el municipio Santiago Mariño, estado Aragua.
Una característica que define al Zoológico Leslie Pantin, es que allí solo habitan animales de la fauna venezolana. No hay leones, tigres ni elefantes, pero si dantas, chigüires, cunaguaros y caimanes, entre otras especies, que por extraño que parezca, resultan desconocidas para muchas personas.
Ninguno de ellos fue comprado o cazado, sino que un alto porcentaje han sido donados, tras ser víctimas del tráfico ilegal de especies silvestres; otros llegaron producto de intercambios con otros zoológicos principalmente para participar en proyectos de reproducción y otros tantos han sido rescatados, como Miguelina, una puma encontrada por llaneros en el estado Guárico, luego de que fuera atacada por unos perros. Estas personas se comunicaron con el Zoológico Leslie Pantin, allí fue recibida, la cuidaron y convirtió en la estrella del lugar, generando sensación entre los visitantes.
Es importante resaltar que pese a la buena disposición, en muchas ocasiones hay animales que no pueden ser recibidos en este zoológico, ya sea porque no cuentan con el espacio adecuado o porque el animal no pertenece a la fauna venezolana ni está en peligro de extinción, en esos casos, los Pantin recomiendan a las personas dirigirse a lor organismos competentes, pero, su principal recomendación a todos los ciudadanos es que eviten a toda costa tener este tipo de animales, pues esto, además de representar un gran daño a la fauna, es un delito penado por la Ley.
El matrimonio Pantin, cree firmemente que el tiempo en que los zoológicos servían sólo como lugar de exhibición de animales exóticos para el entretenimiento, quedó en el pasado. De allí que se han enfocado en procurar el bienestar y la conservación de cada una de las especies que están en su zoológico.
“La parte de la recreación es importante y es una de las funciones de un zoológico, pero tú unes esa recreación con conciencia y educación ambiental y estás haciendo conservación”, resaltó el Dr. Pantin.
Para lograr esto, se enfocan en primer lugar en propinarle a cada animal un recinto óptimo, imitando lo más posible su hábitat con troncos, palos, vegetación, piso de hojas y otros elementos naturales, según sea el caso, de tal manera que éste no se estrese y viva con más libertad. De hecho, cuenta con lagunas y espacios abiertos para los animales que así lo requieran.
En este espacio desarrollan, en alianzas con otros zoológicos y organizaciones del país como el Hato Masaguaral, el Grupo de Especialistas de Cocodrilos de Venezuela (GECV), FUDECI e incluso, con instituciones internacionales, una serie de Proyectos de Conservación y Reproducción de especies que están en peligro extinción, para su posterior liberación a la naturaleza.
Entre estas especies están el mono araña, el cardenalito, el caimán del Orinoco, el caimán de la Costa y el galápago zuliano, animales que, por diversos factores, principalmente la destrucción de su hábitat, han visto reducidas sus poblaciones en la naturaleza.
Estos proyectos los ejecutan con paciencia, pasión y muchas investigaciones, para saber cuándo se reproducen los animales y el momento y lugar adecuado para liberarlos, de tal manera que al hacerlo el ecosistema no se vea afectado. Para esto último se cercioran que cada animal liberado, además de que pueda valerse por sí mismo y cuente con las capacidades para adaptarse al medio ambiente, también esté completamente sano, de tal manera que no lleve enfermedades a sus congéneres.
Hasta los momentos han reproducido y liberado con éxito caimanes del Orinoco, galápagos zulianos y morrocoyes, pues, aunque estos últimos no están en peligro de extinción, los hay pocos en la naturaleza.
Otra forma que tiene este zoológico de contribuir a la conservación es creando conciencia en la población sobre la importancia y cuidado de la fauna venezolana, algo que hacen a través de sus visitas guiadas.
Estas visitas las ofrecen previa cita y pueden ser solicitadas a través de la cuenta en Instagram @zoo_lesliepantin o el número teléfonico (0414) 452.02.79. Por lo general se admiten grupos no mayores de 60 personas al día, esto con el fin de nos estresar ni incomodar a los animales. Los fines de semana se atiende a grupos particulares y de lunes a viernes a instituciones educativas y empresas
Durante el recorrido los visitantes son atendidos por Tuenda de Pantin, quien no solo impresiona con el amplio conocimiento que tiene sobre las características y costumbres de las especies, sino que conoce al detalle la historia de cada uno de los animales que allí habitan (cómo llegó allí, si nació en el lugar, su carácter, qué le gusta y qué no), datos que transmite de una manera sencilla y elocuente.
Asimismo, se enfoca en hablarle a los visitantes sobre la importancia de cuidar la naturaleza y por qué no se debe tener animales de la fauna silvestre como mascotas o en cautiverio, información que asegura es primordial para generar en ellos, especialmente en los niños, la semillita de la conservación.
Es importante resaltar que durante el recorrido se respeta al 100% las características y naturaleza de los animales, por ejemplo, si es una especie nocturna no se molesta para que la vean; de igual forma, es el mismo animal quien decide si se acerca o no a las personas; y aunque el espacio no es un zoológico de contacto, en algún momento los visitantes pueden darles comida a algunos de ellos.
Estas visitas representan para este zoológico una forma de auto sustento, es decir, obtener recursos que le permitan alimentar y mantener en buen estado a los animales sin tener que depender de organismos gubernamentales; y seguir desarrollando proyectos de reproducción.
Algunas especies que se pueden observar en el Zoológico Leslie Pantin
- Venado Caramerudo
- Galápago zuliano
- Morrocoy
- Cardenalito
- Báquiros
- Cunaguaro
- Caimán del Orinoco
- Guacamayas
- Danta
- Puma
- Flamencos
- Zorro camacita
- Cuchicuchi
- Rey Zamuro
Autor: Ana Ruth Rodríguez
Fuente: Diario El Aragueño